Visonado el documento gráfico es el momento de dejar vuestras impresiones en el blog. Todo aquello que os haya suscitado este experimento y la utilidad en los procesos formativos. Os dejo un breve resumen del mismo:
Al día siguiente del asesinato de Martín Luther King y ante la respuesta de sus alumnos/as, una maestra estadounidese, Jane Elliot, decide que ha llegado el momento de que sus alumnos de tercer grado vivan la discriminación "en su propia piel" y aprendan algo muy sencillo y complicado a la vez: TODOS los seres humanos somos iguales.
Para conseguirlo dividió la clase por el color de sus ojos asegurando a los niños que este rasgo físico determina aspectos de caracter, inteligencia,...Así se enfrentaron con la realidad de un mundo excluyente en el que los seres humanos eran discriminados por sus características físicas.
Este "experimento" dio lugar a un documental titulado "la clase dividida" y es, sin duda, una aplicación práctica del enfoque socioafectivo en la educación para la paz.
Veinte años después reúne a sus alumnos/as para evaluar la experiencia. El documental recoge también la aplicación de esta experiencia a un grupo de funcionarios de prisiones.
me encanto el como lo hizo, el por que lo hizo y el momento en que lo hizo
ResponderEliminarEn mi opinión, el experimento es bastante interesante, aunque creo que es excesivo respecto la edad que presentan los menores. Es importante ponerse en el lugar del otro, y la mayoría de las veces no somos concientes del problema que puede o que podemos ocasionar en la sociedad.
ResponderEliminarcreo que fue duro el experimento porque se hizo con niños,pero creo que los niños respondieron bastante bien y fueron empáticos y cuando termino el experimento los niños no tuvieron secuelas
ResponderEliminaren este experimento, comprendemos hasta donde se puede llegar cuando te pones en el lugar de otro, lo que sientes, lo que te hacen, etc. Tal vez se podria emplear en otros ambitos y cuando lo realizo con adultos tambien fue impactante, lo malo es que humilla a algunas persona
ResponderEliminaryo nunca lo haria con menores me parece muy arriesgado, en cambio con adultos no me parece mal ya que les hizo pensar.
ResponderEliminarEl experimento que hizo la profesora con los alumnos me parecio muy bien, te das cuenta còmo los niños son muy manipulables y lo cruel que pueden llegar a ser.
ResponderEliminarSi todos tuviéramos capacidad de empatía, no tendríamos porqué pasar por este experimento para ponernos en la piel de los demás, pero, desgraciadamente esto no es así, por lo que para que la inmensa mayoría pueda sentir como se sienten otras personas no hay mejor manera que hacerles meterse en su piel. El experimento es duro por la edad de los niños, a mayor edad, menos duro nos parece, de hecho lo recomendaría en adultos no en niños.
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